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¿Qué pasa si dejo la estufa prendida por mucho tiempo?

Diversos especialistas aseguraron ayer que en ningún caso se debe dormir con una estufa encendida, porque la combustión consume el oxígeno y, si es deficiente, genera monóxido de carbono (CO), un gas que no se puede detectar porque no huele y tiene consecuencias fatales.

Los riesgos de las estufas de gas y consejos para su uso

Aunque las estufas son exclusivas para el cocinado de los alimentos pero uno de los usos concurridos sobre todo en épocas invernales son utilizadas para calentar los hogares cuando carecen de calefacción o calentadores de gas y aquí es donde se debe de tener mucho cuidado ya que los calefactores de gas tienen un termostato en caso de una interrupción del suministro y en automático se corta, existiendo otros calefactores antiguos que no cuentan con este dispositivo de seguridad lo cual tendrán que verificar constantemente el encendido del mismo mas no se recomienda que se deje por la noche encendido por el tema de una falla de suministro de gas ya que puede causar una fatalidad.. Aunque esta es una opción económica y eficaz para calentar las habitaciones, existen algunos riesgos.

Las estufas generan calor mediante la combustión de gas, generalmente, gas butano (el butano es un hidrocarburo saturado e inflamable). Debemos tener en cuenta que esta combustión del butano consume oxígeno y produce vapor de agua, por lo que al tener una de estas estufas enchufadas aumenta la humedad relativa y disminuye el oxígeno de la estancia.  

De esta manera, cuando el funcionamiento de la estufa es correcto, esta desprende agua y dióxido de carbono. Pero cuando la combustión se lleva a cabo correctamente, se efectúa una liberación de monóxido de carbono, un gas muy nocivo que puede provocar explosiones e incluso llega a ser letal. 

Aunque en la actualidad se han creado estufas modernas que cuentan con un mecanismo piezoeléctrico para el encendido, termostatos y hasta mecanismo de seguridad que simplifican su uso,

Recomendaciones de uso para evitar cualquier peligro. 

1-Cheque que siempre que la lumbre o llama esté de color azul

2.-Verificar que la llama no se apague

3.-La estufa debe de estar ubicada preferentemente lejos de materiales inflamables tales como muebles o cortinas.

4.-Controlar las interruptores de salida de gas o válvulas de flujo: mantener la posición de la llave abierta o cerrada en función de su uso

5.-Abrir las ventanas si se detecta olor a gas y no encender la estufa ni las luces

6.-Revisar las estufas cada cierto tiempo 

7.-No es recomendable dormir con ella encendida ni tenerla en habitaciones de pequeñas dimensiones.

CUIDADOS PREVENTIVOS.